Grupo de Expertos Solynieve: El Eje de la Tierra (2012)
[xrr rating=7.2/10]
¿Es posible comentar el último álbum de Grupo de Expertos Solynieve sin hacer ninguna referencia a Los Planetas? No, así que despachémoslo cuanto antes. Que J., líder y cantante de Los Planetas, ejerza esos mismos roles en GES y que el sonido de los dos grupos tenga mucho en común -más con la música de Los Planetas hasta hace no mucho, cuando no trataba de reinventar algo que, en su caso, no requería reinvención-, son características que marcan tanto este El Eje de la Tierra, como su primer disco Alegato Meridional (2006). Y si tú, como el que suscribe, consideras que el legado musical de Los Planetas es uno de los más importantes que ha dado la música pop en este país, entenderás porque las puntos de contacto no hacen a GES menos interesantes sino todo lo contrario. Y una vez cerrado el paso dedicado a glosar la referencia a Los Planetas vamos a El Eje de la Tierra.
El segundo disco de GES es un álbum indignado. De la mano de la Fundación Robo (http://esunrobo.bandcamp.com/) y de Roberto Herreros (ex-Grande-Marlaska) y de Nacho Vegas, un puñado de bandas y personalidades del indie nacional hacen un esfuerzo por posicionarse en la realidad. Y hoy la realidad es la crisis y los que luchan contra ella y contra los que la han propiciado y esperan a ver cómo crecen sus dividendos sobre nuestra miseria. Por eso J. y Manuel Ferrón (que también se reparten las tareas de composición) cantan defendiendo las banderas de las causas imposibles (“¿Por qué no te largas de aquí?”), dejan claro que son canciones para levantar la voz (“Blues chillando en un cubo”), denuncian la pobreza y la caída de una clase ficticia que creyó en el mito del ascensor social (“De baja”)… Pero tranquilos/as, fans del indie más alienado, El eje de la Tierra no articula un discurso político como tal, aun estamos lejos de ello, solo hay retazos de indignación y mucho es ya.
Musicalmente, este es un álbum de sonido sosegado, perezoso a veces. De claro sabor andaluz, J. se divierte remarcando, casi como seña de identidad, su acento andaluz, aunque, como en el anterior, también este disco huele a otro sur, al de Los Estados Unidos de Norteamérica. Parece que en el indie las mixturas musicales también dan buen resultado y que Andalucia es terreno fértil para ello. Así, no es solo una curiosidad que en este disco haya una reivindicación del legado morisco y del regreso a las raíces, en el tema “La reconquista de Graná”, y que otros grupos de esas latitudes estén incorporando la música tradicional a su sonido.
¿Quién nos iba a decir que partiendo desde la modernidad más hedonista y orientada hacia el mundo anglosajón se podía regresar a la protesta social y a propuestas más ancladas en las realidades locales? Bienvenido sea ese comienzo de viraje de la música estatal y más si la propuesta musical es tan interesante como la de GES.